Perros y la piscina: lo que necesitas saber

A muchos perros les encanta ir a nadar, especialmente en el calor del verano. Si tienes tu propia piscina, (quizás la construyó Piscinas Cuyo, claro), podría estar considerando dejar que tu perro amante del agua nade en ella.

Permitir que tu perro nade en la piscina no es una mala idea, pero hay algunas cosas que debes considerar primero.

¿Deberías dejar que tu perro nade en la piscina?

 Depende de vos y tu familia decidir si dejan que su perro entre o no a su piscina. Los factores más importantes a tener en cuenta son la seguridad y el mantenimiento. Los perros siempre deben ser supervisados ​​cuando nadan, incluso si se trata de una pequeña piscina en el patio trasero. No todos los perros son buenos nadadores, por lo que debes tomar las cosas con calma y adaptarte a tu perro. Además, la presencia de tu perro en la piscina cambiará la forma en que necesita mantenerlo. Tomará más tiempo y trabajo asegurarse de que los niveles químicos de tu piscina sean apropiados y que su sistema de filtración funcione correctamente.

¿El agua de la piscina es segura para los perros?

 Una piscina bien mantenida es generalmente segura para que los perros naden en ella. El agua de la piscina ya sea cloro o agua salada, no se considera dañina en la mayoría de las circunstancias. Sin embargo, hay algunas cosas para recordar.

Todos los que nadan ingieren una cantidad de agua. Los niños y los animales tienden a tragar más que los humanos adultos. Los perros simplemente no saben nada sobre esto, y pueden lamer activamente el agua de la piscina. Esto debe ser evitado. Beber agua de la piscina puede provocar un trastorno del tracto gastrointestinal, lo que puede provocar náuseas, vómitos y daño esofágico. En casos raros, beber cantidades excesivas de agua de la piscina puede causar una condición peligrosa llamada intoxicación por agua. Esto causa un desequilibrio importante en los electrolitos en el cuerpo, lo que lleva a un daño cerebral grave y posiblemente irreversible.

Los productos químicos para piscinas pueden causar irritación y sequedad de la piel tanto en humanos como en animales, especialmente si nadan con frecuencia. Asegúrate de enjuagar el pelaje de tu perro después de nadar y revisa la piel regularmente para detectar enrojecimiento, descamación u otros problemas. Pónte en contacto con tu veterinario si la piel parece anormal.

¿Cómo pueden los perros afectar tu piscina?

Muchos expertos en piscinas dicen que un perro en una piscina tendrá el mismo efecto en el agua de la piscina que tres humanos. Esto significa que la cantidad de escombros que tu perro trae a la piscina es mucho más de lo que traen los humanos.

Los perros, por supuesto, tienen mucho más pelo que las personas. Cualquier pelo suelto o muerto en el pelaje de tu perro terminará en el agua de la piscina, afectando el sistema de filtración y el equilibrio químico. El pelaje de un perro también tiende a tener muchos escombros como tierra, polen e incluso materia fecal que se deposita en el agua de la piscina cuando nada. Los parásitos y gérmenes también pueden contaminar el agua de la piscina y afectar a los humanos y otros animales que ingresan a la piscina.

Los perros también tienen uñas fuertes que pueden rasgar fácilmente el revestimiento de la piscina, por lo que es mejor mantener a tu perro fuera de las piscinas con revestimiento de plástico o vinilo. Las uñas también pueden ser peligrosas para otros nadadores debido a la forma en que los perros usan sus patas para remar en el agua. Además, sus uñas pueden dañar fácilmente los juguetes y equipos de la piscina.

Puedes reducir los efectos negativos que tiene tu perro en la piscina si lo mantienes limpio y bien arreglado. Recorta las uñas de tu perro regularmente y manténlas lisas. Baña a tu perro regularmente y cepilla bien el pelaje, especialmente si tu perro arroja mucho. Antes de dejar que tu perro entre en la piscina, cepíllalo bien y luego enjuágualo con agua. Esto reducirá la tierra y otras substancias que trae a la piscina.

Recuerda mantener tu piscina limpia y el equipo de la piscina en condiciones para mantener la piscina segura para todos los nadadores. Monitorea de cerca el balance químico para que el agua de la piscina sea tratada adecuadamente.

Todos cuidados necesarios para que podas disfrutar de tus amigos caninos en la pileta y juegues con ellos. Nosotros, en Piscinas Cuyo, tenemos siempre unos juguetes y uno, dos, tres…..perros para jugar con ellos en las tardes calurosas de nuestra querida Mendoza.

Piscina de seguridad para perros

No todos los perros son nadadores naturales, por lo que es importante comprender las habilidades de tu perro antes de permitirle nadar. Si ya sabes que tu perro es un buen nadador, entonces está bien dejarlo saltar y disfrutar, pero nunca lo dejes sin supervisión.

Si tu perro es nuevo en natación, acostúmbralo gradualmente en el agua. Nunca lo obligues a meterse en la piscina; en cambio, déjalo explorar por su cuenta. Considera conseguirle un chaleco salvavidas hasta que sepas que se siente cómodo nadando. Pasa tiempo en la piscina ayudándolo a mantenerse seguro y cómodo, pero ten cuidado con las uñas afiladas que pueden arañarte fácilmente.

No todos los perros se sienten cómodos saltando en una piscina o subiendo escalones para salir. Asegúrate de ayudar a tu perro, especialmente si tu piscina solo tiene escaleras. Una piscina con entrada a un solario húmedo es mucho más fácil para que los perros entren y salgan.

Asegúrate de que cualquier cubierta de piscina en uso sea una cubierta de seguridad y no una cubierta flotante. Los animales (y los niños) pueden ahogarse fácilmente si quedan atrapados debajo de una cubierta de piscina.

Y si tienes cualquier duda sobre este tema, llámanos y algún especialista de Piscinas Cuyo con mucho gusto te asesorara. ¡Siempre estamos listos!